domingo, 8 de enero de 2012

Nadie dijo que fuera fácil.

Confiar es un acto de valor que sólo puede salir de uno mismo, y si uno mismo se lo permite. Confiar es caminar con los ojos cerrados, incluso cuando no te llevan de la mano. Confiar es desconfiar de uno mismo para creer un poco más en otros. Confiar es entregar algo tuyo sin peros ni pretextos, porque la confianza en sí, implica también cuidar y guardar. Confiar es casi como dar amor, solo que en el amor necesitar de tu corazón, y en la confianza todo lo demás. Confiar es dejarse ayudar y reconocer que no podemos hacerlo todos solos. Confiar es creer en la luz donde reina la oscuridad. Confiar es olvidar las excusas y los prejuicios, incluso sabiendo que nos pueden lastimar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario